22.11.07

Macao Grand Prix: la locura china








Esta frase, que decoraba el carenado de las motos del gran Mike Hailwood, se hace muy presente en el Gran Premio de Macao. Una religión casi extinguida cuyo culto sobrevive en este rincón aislado de China. Aquí se corre "por amor al motociclismo"... siempre que te hayan invitado, claro.
Antigua colonia portuguesa, Macao es una región administrativa especial de la República Popular de China desde 1999. Esta ubicada en el este de Asia, a 60 km de Hong Kong. Si hablas portugués o chino cantonés, estás de enhorabuena. Pero turismo aparte, el mayor atractivo de esta pequeña ciudad de 25 km2 es la cita anual del GP de Macao. Un evento dedicado a los mejores pilotos de trazados urbanos del mundo, pues discurre en su totalidad por las calles de la propia ciudad. El primer GP de Macao de coches se celebró en 1954, fruto del entusiasmo local por los deportes de motor. Pero no fue hasta 1967 cuando se disputó la primera carrera de motos.
Como cada año, y ya van 41 ediciones, el mes de noviembre es el elegido para el evento. Se construye una pista improvisada de 6,2 km perfilada por muros, tapias y por un triple guardarrail negro y amarillo que haría las delicias de la abeja Maya. ¿Alguna escapatoria? No seas iluso, no existen. Por la pintura de las marcas viales tampoco tienes que preocuparte. Desliza tanto como cualquier otra, y como sólo hay una trazada, o pasas, o... te pasas. Lo mejor de todo es que el día de la carrera la policía no pone multas...




El Circuito

El trazado consta de 5 rectas y 16 curvas. Las 5 rectas se distribuyen así: 3 nada más darse la salida (todos a la vez como en los Grandes Premios), y 2 al final unidas por la Curva de los Pescadores. La tercera de ellas, se hace casi a fondo con el desarrollo corto que montan hasta que te encuentras con una increíble frenada para acometer la Curva del Hotel Lisboa, de 90º. También hay otra de similares características y que se llega aún más rápido tras la Subida de San Francisco: la Curva de la Maternidad. Las principales curvas son muy reviradas y no se pueden apurar todas las marchas. Tras la salida todo va bien, puesto que la anchura de la calle es la máxima de todo el circuito: 14 metros. Pero a medida que avanzas en el trazado, la pista se va estrechando hasta el último tercio, donde alcanza un mínimo de ¡7 metros! Esta sección en forma de “S” empieza en la Curva Doña María y finaliza con una de las partes más técnicas y peligrosas, la zona más lenta del circuito: la Horquilla Melco, de 180º, que se traza en primera...

¡VIVA MACAO!

No hay comentarios: